Masiva marcha frente al Congreso clama justicia para Fernando

Martes, 18 de Febrero de 2020. 21:00 Hs.

Miles de voces clamaron en unísono justicia para Fernando, frente al Congreso de Buenos Aires y en Villa Gesell. El joven hijo de paraguayos fue asesinado a golpes por un grupo de rugbiers.

Captura NPY

En una convocatoria conmovedora, con miles y miles de argentinos que marcaron presencia frente al Congreso de Argentina y en Villa Gesell, ciudad veraniega donde el joven Fernando Sosa fue a pasar las vacaciones y recibió la muerte a golpes por grupo de rugbiers a la salida de una discoteca y que habría sido atacado a traición.

Carteles, velas encendidas, rostros jóvenes, adultos y de ancianos se pudieron ver en una marcha multitudinaria clamando justicia para Fernando. Sin importar clase social y mucho menos religión dieron su apoyo a los padres del joven que fueron los primeros en marcar presencia y exigir el peso de ley por la muerte de su único hijo.

"La violencia es un flagelo que arrasa y destruye sin distinción alguna. No hay religión, clase social, nacionalidad, raza o edad que la frene. Por eso tenemos que decir basta de violencia, con energía y decisión para que se escuche en cada rincón de la Argentina", dice el texto que escribieron los padres de Fernando para convocar a la marcha.

Graciela Sosa fue la primera oradora, notablemente destrozada expresó que todos los días encuentra su casa vacía, y que los padres de los asesinos al menos pueden abrazar a sus hijos en la cárcel, sin embargo ella ya nunca más. “Lo que hicieron nos arruinó la vida”, afirmó la madre.

“Él era mi vida, mi amor. No saben cuánto lo extraño. Quiero justicia”, reiteró y tras expresar el breve discursó se desvaneció, y su esposo logró contenerla junto con el equipo de auxilio. En ese momento una oleada de gritos de aliento y las lágrimas de los presentes marcaron el momento gritando “asesinos” y “Fernando presente”.

Posteriormente se dio una misa donde el minuto de silencio fue una de las mayores muestras de apoyo y respeto impoluto de todo el pueblo argentino.