Sábado, 21 de Noviembre de 2015. 13:41 Hs.
El estatal Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura (MNP) alertó a Efe sobre un "recrudecimiento" en las violaciones de derechos humanos de las personas privadas de libertad.
Lo mencionado se presenta, debido al "alarmante" nivel de hacinamiento en las cárceles y el "abuso" de la prisión preventiva.
"Hay una persistencia en la violación de derechos humanos, vemos que existe un recrudecimiento y un aumento de las violaciones cuando consideramos las condiciones en las que se encuentran las personas privadas de libertad", dijo Carlos Portillo, presidente de la estatal.
Tacumbú es el principal centro penitenciario del país. Archivo/UH.
Entre las violaciones registradas se encuentran "los golpes, la amenaza, las extorsiones", además de "la falta de condiciones higiénicas y ambientales" y la ausencia de "servicios básicos de atención sanitaria", sostuvo Portillo.
"No estamos hablando de atención sanitaria especializada, sino de condiciones de salud básicas, en general los internos son desatendidos y son abandonados", agregó.
Añadió que esa situación se recrudece considerando que en la mayoría de las 16 cárceles del país, donde se encuentran alrededor de 12.300 internos, según el más reciente informe del Ministerio de Justicia de Paraguay, se registran altos niveles de hacinamiento.
"Todas las cárceles sobrepasan su capacidad, algunos casos son alarmantes", sostuvo Portillo, citando como ejemplo la penitenciaría de Tacumbú, la mayor del país y ubicada en Asunción, que tiene una capacidad aproximada de 1.400 internos, pero que actualmente alberga a unos 4.000 reclusos.
Agregó que el hacinamiento se debe en parte al "abuso" de la prisión preventiva, ya que entre el 70 % y el 90 % de las personas en las cárceles se encuentran sin condena, sostuvo el especialista.
"Estamos hablando de procesos judiciales que están en absoluta moratoria, donde el tiempo en que los recluidos están esperando para tener una sentencia condenatoria ya se convierte en pena anticipada", agregó.
Portillo expresó su preocupación de que el sistema penitenciario contribuya al aumento de la criminalidad, en vez de disminuirla, al convertirse en "parte de la enfermedad, del problema, y no de la solución".
En setiembre de 2014, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) expresó su preocupación por el uso "abusivo" de la prisión preventiva en Paraguay, después de la visita del relator de la CIDH sobre los Derechos de las Personas Privadas de Libertad, James Cavallaro.
El informe observó que el efecto del uso excesivo de la prisión preventiva se traduce en una sobrepoblación carcelaria en Paraguay, lo que provoca serias deficiencias en el sistema carcelario paraguayo como instalaciones sanitarias insalubres, escasez de comida e incluso personas carentes de celdas y camas, que duermen en el suelo.
En enero de este año, el Ministerio de Justicia aseguró que reduciría "significativamente" el nivel de hacinamiento en los centros penitenciarios, debido a la ampliación de cárceles en el interior del país. EFE
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